Jale sus suaves mechones tan negros como la noche haciendo que simultáneos gemidos se escaparan de sus labios, me pareció uno de los sonidos más excitantes que escuche en mi vida. Quería escucharlo hasta el cansancio. Quería que me tomara y dejar que todo tomara su curso. Quería que fuera rápido... Si ya okey, quiero coger con el ahora mismo. No me importa nada, no me importa quién es... solo quiero hacerlo. El fuego me está consumiendo y no se por cuánto tiempo lo pueda controlar, no creo que ni un par de minutos me quede.
Mis gemidos, sus jadeos, nuestros corazones bombeando a todo lo que podían y nuestras manos buscando más. Cosa que no me importaría.
-All.- sentí como susurraba sobre mis labios mientras una de sus manos hacia círculos en torno a mi vientre. Un escalofrío me recorrió el cuerpo ¿Que estoy haciendo? ¿De verdad quiero hacer esto? ¿Con él? ¿Con Ariel? El chico que más odio y quiero ver muerto en todo este puto mundo. Sí, sí que lo quiero. Pero mi maldito orgullo y sentido común no me dejan vivir y solo me quieren joder este rato, que posiblemente sea el mejor, después de todo.
-¿Que estamos haciendo?- pregunte queditamente, poniendo toda mi fuerza de voluntad que no sabía ni que tenia, haciendo que se alejara de mi tan solo unos centímetros para así poder verlo a los ojos y perderme como una pendeja en ese azul tan hermoso e irreal.
-¿No quieres hacer esto?- su tono fue seductor pero a la vez tenía una nota de decepción. Me sentí algo mal la chispa que brillaba en su rostro desapareció y sus manos se esfumaron de mi cuerpo... haciendo que el frió de la habitación me golpeara de lleno.
-Si quiero, pero....- ¿Okey? ¿De verdad le dije que si quiero hacerlo? ¿Es en serio? Oh señor Jesús, claro que quiero... solo tengo miedo.
-¿Quieres?- su rostro se sorprendió en menos de un segundo y el brillo volvió a sus gemas azules. No se me ocurrió responder nada coherente, así que solo asentí. El me miro dubitativo y perplejo aun... lo sé, yo también lo estoy. Aun no me creo que de verdad quiera hacerlo... con Ariel.
-Ariel.- murmure de nuevo ya incomoda, por su mirada. El sin esperar más de un solo movimiento me tomo de la cintura e hizo que ambos nos levantáramos del asiento que compartíamos.
Mi espalda choco contra la pared más cercana, sus manos seguían ceñidas con fuerza a mi cintura y su frente contra la mía. Sinceramente esta es la primera vez que me siento intimidada, sus ojos azules estaban clavados sobre los míos haciéndome sentir desnuda, su sonrisa de medio lado acompañada con sus jadeos estaban haciendo que mi corazón palpitara mas fuerte y sus manos si se movían de su lugar creo que iba a caer al suelo.
-¿Y si estamos haciendo algo mal? ¿Y si...- pero no logre concluir ya que sus labios se estamparon contra los míos por unos segundos. Se volvió a separar de mi con los labios entre abiertos y la respiración aun agitada.
-Que se jodan.- murmuro. Lo mire unos segundos antes de posar mis manos a cada lado de su rostro y volverlo a besar con locura.
-Que se jodan.- concorde sobre sus labios. Sentí como sonreía y a mí también se me escapo una mínima sonrisa.
Nuestros labios se movían sincrónicamente, como si lleváramos practicando aquello desde hace mucho tiempo, nuestras lenguas se conocían y nuestras manos se movían sin censura. Me encanto la sensación que dejaba el camino que recorrían sus expertos dedos. No lo detuve, ni lo detendré... ya no tengo suficientes fuerzas para hacerlo. Lo quiero a él y lo quiero ahora.
Sus ojos azules volvieron a mirarme interrogantes cuando mis labios se separaron de los de él, pero entendió que no me iba a detener cuando vio el rumbo de mis manos. Desabroche con facilidad los botones e hice que se quitara la aun manchada camisa blanca. Mire su torso completamente marcado, cada bíceps y tríceps acentuado mientras hacia un movimiento, al igual que su espalda la cual me atreví a recorrer sin importarme nada más. De un solo movimiento el saco sobre mi cabeza la única prenda que cubría mis pechos, los cuales quedaron completamente expuestos... algo dentro de mí, quería que los cubriera y gritara para que me devolviera el top, pero la forma en que me miraba y como se mordía el labio, me hizo perder la razón en cuestión de segundos.
Paso un dedo con firmeza desde el inicio de mi cuello, descendiendo por entre mis pechos bajando hasta mi ombligo y deteniéndose al inicio de mi vientre, un escalofrió me recorrió de pies a cabeza. Sus ojos me volvieron a mirar, tratando de buscar algo en los míos... algún ápice de duda o negación. Sé que no lo encontrara, pero el creo que quiere cerciorarse.
Lo tome desprevenido cuando de un solo movimiento me lance a sus brazos y lo bese con fiereza, moviendo de nuevo mis manos en torno a todo su cuerpo... su perfecto cuerpo. Ya no había marcha atrás y tampoco quería que eso pasara. Sus manos temblorosas recorrieron mi cuello, clavícula y comienzo de pechos, pero ahí se detuvo parecía que no iba a continuar. Tome sus manos entre las mías, haciendo que tomara con las dos mis senos… un gemido se escapo de mis labios.
Aquello lo hizo tomar confianza y creo que volver a ser el mismo, sus manos se mantuvieron ahí amasando y pellizcando, eso hizo que prácticamente me mantuviera a sus pies, sus movimientos eran perfectos y sabia como complacerme. Baje mi boca por su cuello y lamí todo a mi paso. El bajo su traviesa boca a mis pechos imitando los actos de sus manos, haciendo que me volviera loca y ni siquiera estaba dentro de mí. Gemidos, gritos cortos fue todo lo que pude decir con coherencia. Ariel lo disfruto lo note por la sonrisa que se mantenía en su rostro, como si estuviera tatuada.
Mi boca probo y degusto la pálida piel de sus hombros al igual que su torso. Sabía a gloria, gloria musculosamente perfecta. Pose mis manos en su cabello y deje que se enredara ahí, entre sus finos y oscuros mechones. De mi no se oían mas que gemidos y ronroneos sordos, su boca me llevaba a la cima y sus manos ayudaban a eso. Arquee mas mi espalda y me removí más fuerte, cuando su mano bajo hasta mi botón… sintiendo lo mojada que estaba, toda para él.
-All.- murmuro ronco en mi oído, haciendo que los vellos de mi cuerpo se pusieran en punta. Agite mis caderas de un lado a otro, restregándome contra su mano, aunque más bien le echaba leña a mi cuerpo… el notaba como tenia y yo dejaba muy feliz que lo hiciera.
Esquivo mi ropa interior y de un movimiento metió uno de sus dedos en mí. ¡Oh señor Jesús! Un grito abandono mi cuerpo, creo que fue acompañado por más, cuando metió y saco de manera continua aquellos, a demás que yo me fui incluida prácticamente saltando, sintiendo como perdía la conciencia y todo el sentido común. Ya fue suficiente. Metí mis manos entre sus jeans aun abrochados y agarre su notable erección. Gimió en la piel de mi cuello la cual devoraba. El en venganza metió dos dedos, jadee más fuerte.
-Ariel por favor…- pedí agarrando más fuerte su miembro. El parecía ceder pero no del todo.
-Pídemelo.- dijo de una forma un tanto retorcida.
-Ariel… te lo pido.- me tomo unos minutos más de lo que pensé, pero logre decirle lo que quería.
Sin esperar mucho mas arranco la parte inferior que me cubría, dejándome expuesta ante sus obscurecidos ojos y sus jeans los quite de manera frenética. El busco en la parte trasera de su ropa, sacando un preservativo el cual se coloco como todo un experto. Viniendo de él no me extraña. De nuevo y antes de todo, me tomo del trasero haciendo que enrollara mis piernas en su espalda, y con un movimiento entro en mí. Ambos soltamos un gemido ante aquello.
Entro y salió, salió y entre, más que bienvenido estaba a que hiciera aquello… más de lo que pensé. Sus embestidas hacían que todo mi mundo diera vueltas y sus labios me hacían escapar de la realidad. Todo mi cuerpo quemaba en llamas y todos sus toques avivaban más el fuego inexistente que dejaba la fricción de ambos cuerpos. Toque, sentí, pedí mas, lamí, probé, deguste, mordí… todo lo que pude, su cuerpo era encantador y demasiado comible para cualquiera. Algo dentro de mi no le gusto aquello… él sería solo para mi.- rugió una voz en mi subconsciente. Agite mi cabeza ante aquello. ¿Desde cuándo soy posesiva?
-Ariel.- gemí contra sus labios, mientras embestía con más fuerza y más rápido. Sus labios pellizcaron mi pezón y otro grito se escapo de mis labios.
-Allison.- jadeo él. Lo mire hipnotizada. Su rostro adorable había cambiado por completo, a uno de un hombre y sumamente excitante, acompañado de una ligera capa de sudor y el ceño tenuemente fruncida a causa del esfuerzo. Cuando sus labios se fruncían para luego dejar escapar un gemido, hacían que mi ritmo aumentara. Su cara de estoy-a-punto-de-llegar, no tenía comparación con la de nadie.
El ritmo aumento a uno casi frenético, haciendo que esta vez chocáramos contra la pared, su cuerpo se recostó contra el mío… haciendo que nuestros pechos se unieran, nuestros cuerpos no los separa nada y nuestros rostros estuvieran a milímetros. Su mirada clavada en la mía hizo que no pudiera más y con una última embestida realmente fuerte. Llegue. El me acompaño luego de otra más.
Caí derrotada contra su pecho y el nos sostenía contra la pared. Oía sus latidos y estoy más que segura que el escuchaba los míos, ambos galopaban fuertemente al mismo ritmo y con la misma dureza. No sé cuánto tiempo paso, tal vez me quede dormida. Pero pude sentir como el salía de mi… haciendo que quedara un extraño vacio. Para luego tomarme como una bebe y llevarme hasta dejarme sobre una cama, donde el se situó a mi lado y yo por instinto me recosté sobre su pecho. Lo último que supe fue como sus labios se posaban en mi frente y un suspiro inundaba la habitación.
-Eres más perfecta de lo que pensé… te amo.- y no supe nada más porque fui arrastrada por los brazos de Morfeo.
Al fin pude publicar la tercera parte de este mini-fic. ¡Wi! Estoy que bailo, ni se imaginan cuanto me costo siquiera escribir el primer párrafo, según Emma quedo perfecto. ¿Que dicen ustedes? No me quejo, pero no soy experta en este tipo... así que mi opinión prácticamente ni cuenta. En fin, se que les ha gustado mucho esto así que por eso me force mucho a continuarlo, tal vez por eso tarde... pero ya lo tienen acá, lo acabe hace como diez minutos. Aja, no diré mucho porque creo que ahorita me iré a ver series o no se que. Me largo con el permisito de ustedes. Las quiero muchísimo a todas se me cuidan y chaii :3
2 comentarios:
Como ame eso *---* esta magnifico!!! yo quiero un chico asiiiii (babaaa)
Me encanto Vivs y lo mejor es el final T_T qye quiero seguir leyendo *----* Y sabes que quedo perfecto!!!
*.*
Me encanto! es PERFECTO! creo que soy una pro-hot xD ._. no ya en serio me encanto, fue romantico, tierno, dulce aww :3 y CALIENTE !!!!! cuidate Vivi!
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